El peso colombiano retoma el liderazgo en América Latina: ¿qué hay detrás de su apreciación?

En un escenario económico marcado por la volatilidad cambiaria y las tensiones internacionales, el peso colombiano se destacó en mayo como la moneda más fuerte de América Latina. Con una revalorización del 2,57% frente al dólar estadounidense, logró superar a sus pares regionales y se posicionó como líder en estabilidad y recuperación. Este desempeño genera optimismo, pero también plantea preguntas clave: ¿qué factores están impulsando esta tendencia y qué implicaciones tiene para Colombia y sus vecinos?
Durante mayo, el comportamiento del tipo de cambio del peso colombiano fue dinámico. Inició el mes con una cotización superior a los $4.250 por dólar, alcanzando incluso los $4.300 en los primeros días. Sin embargo, lejos de mantener esa tendencia alcista, la moneda mostró una trayectoria descendente, tocando un mínimo de $4.100 hacia el 29 de mayo. Al cierre del mes, volvió a repuntar levemente, situándose sobre los $4.160.
Mientras otras monedas retrocedían, el peso colombiano ganó liderazgo y estabilidad regional.
Este movimiento no fue casual. De acuerdo con el análisis de la firma Acciones & Valores, la apreciación mensual del 2,6% y semanal del 0,76% se explica por varios factores, entre ellos la relativa estabilidad política, señales positivas en la inversión extranjera y un entorno macroeconómico más controlado frente a otras economías de la región.
Comparado con sus vecinos latinoamericanos, el desempeño del peso colombiano fue notable:
- Sol peruano: se revalorizó un 1,10%, beneficiado por la calma en el escenario político y la recuperación de exportaciones clave.
- Peso mexicano: avanzó un 0,86%, aunque enfrentó presiones tras las elecciones federales.
- Peso chileno: registró una modesta ganancia del 0,38%, influenciado por los precios del cobre.
- Peso argentino y real brasileño: se depreciaron un 1,50% y 0,85% respectivamente, reflejando incertidumbres políticas y desequilibrios fiscales.
Este contraste revela que el peso colombiano no solo tuvo una revalorización sólida, sino que lo hizo en un entorno regional marcado por altibajos y retrocesos en otras economías
El peso colombiano se convirtió en la moneda más revaluada de América Latina con un 2,6% en mayo.
La fortaleza del peso colombiano en mayo no solo es una señal positiva para los mercados, sino también un termómetro del momento económico que atraviesa el país. Aunque la estabilidad cambiaria no está garantizada a largo plazo, este repunte representa una ventana de oportunidad para fortalecer las reservas, dinamizar la inversión extranjera y ofrecer alivio a sectores sensibles a las variaciones del dólar.
Colombia, con una moneda apreciada, gana momentáneamente mayor poder adquisitivo frente al exterior y reduce la presión inflacionaria importada. No obstante, este impulso debe ser respaldado por políticas fiscales prudentes, continuidad institucional y vigilancia macroeconómica, si se desea sostener esta tendencia en los meses venideros.