La UPSA, no solo EDUCA, construye DESARROLLO en Bolivia
Futuro Educativo de Bolivia – Impacto Tangible – Ecosistema Emprendedor – Lauren Müller de Pacheco – UPSA

La historia de la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (UPSA) es la historia de una visión compartida. Es el resultado del sueño de un grupo de empresarios que, hace más de cuatro décadas, decidieron apostar por el futuro educativo de Bolivia desde el corazón productivo del país. Hoy, bajo el liderazgo de su rectora, Lauren Müller de Pacheco, la UPSA reafirma su papel como una institución formadora de talento, impulsora de desarrollo y portadora del ADN cruceño que mira el mundo con ambición y esperanza.
LA CHISPA QUE ENCENDIÓ EL CONOCIMIENTO
Cuando la educación superior atravesaba tiempos difíciles, un grupo de visionarios cruceños asociados a la CAINCO tuvo el valor de mirar más allá de las circunstancias. “La UPSA nació de la capacidad de pensar el futuro en un momento muy difícil para la educación superior”, recuerda Müller. Aquellos fundadores comprendieron que el progreso no se logra reteniendo lo existente, sino cultivando lo posible.
Definiríamos a Santa Cruz como nuestra identidad, está en nuestra mente (cultura cruceña), en nuestras manos (trabajo) y en nuestro corazón (sentimiento).
La rectora explica que la institución fue creada “para evitar la fuga de capital humano del país hacia otros centros de educación superior del exterior”, pero también con el propósito de formar profesionales que comprendan y transformen su entorno. Bajo esa premisa, la UPSA se erigió como una universidad sin fines de lucro que promueve la libertad de pensamiento y la excelencia. Con espíritu pionero, se convirtió en la primera universidad privada de carácter empresarial de Bolivia, consolidando su propósito de desarrollar programas basados “en la verdad, el bien y la integridad del hombre, la sociedad y la naturaleza para aportar a Santa Cruz y el país”.
RAÍCES LOCALES, VISIÓN SIN FRONTERAS
La UPSA no solo nació en Santa Cruz, sino que lleva a Santa Cruz en su esencia. Su identidad se nutre de la apertura, el trabajo y la creatividad de una región que inspira crecimiento. Como afirma Müller, “la UPSA tiene el sello de Santa Cruz, es un patrimonio cruceño, pero acoge a todo el país y también estudiantes del exterior”. Esa dualidad entre lo local y lo global define su grandeza: ser una universidad con raíces profundas y horizontes amplios.
El alma cruceña está presente en cada proyecto, clase y emprendimiento. “Somos amantes y orgullosos de nuestra tierra cruceña, pero a la vez abiertos para tender puentes con todo el país y el mundo”, sostiene la rectora. Ese sentido de grandeza ha permitido a la UPSA crecer y ganar prestigio que impregna a sus profesionales.
EDUCACIÓN QUE TRANSFORMA, CONOCIMIENTO QUE MULTIPLICA
Toda institución que forma líderes deja una huella que trasciende sus aulas. En el caso de la UPSA, su impacto en el entramado productivo es tangible y sostenido. “Tenemos más de 11.500 graduados de Pregrado y 6.000 de Postgrado que ejercen puestos de liderazgo en empresas cruceñas, con una visión global y local”, enfatiza Müller. Cada uno de ellos representa un nodo de cambio, un multiplicador del conocimiento y la innovación.
La universidad también impulsa el crecimiento del ecosistema emprendedor y la investigación aplicada. “Se entregan 40 proyectos anuales en beneficio de micro y medianas empresas, se realizan investigaciones de mercado, análisis de datos y proyectos arquitectónicos para municipios con enfoque social, turístico y productivo”, señala. Así, la UPSA no solo educa, sino que construye desarrollo: convierte la formación académica en motor económico y social.
PERSONAS QUE HACEN GRANDE A LA UPSA
Detrás de cada logro institucional hay personas que creen, se esfuerzan y crecen. La UPSA ha hecho de la gestión humana uno de sus pilares estratégicos. “Contamos con 150 colaboradores y más de 300 docentes. Con todos hay una responsabilidad de cumplir con sus derechos laborales, además tienen grandes opciones de capacitación para seguir formándose y beneficiar a sus esposos (as) y a sus hijos”, explica Müller. Este enfoque responde a una visión de liderazgo consciente, donde el bienestar del equipo es una inversión en sostenibilidad y excelencia.
El compromiso se extiende a los estudiantes. “Son 1.625 estudiantes de pregrado y 556 en Postgrado que gozan de algún tipo de beca que significa más del 50% de la comunidad estudiantil”, destaca la rectora. Además, la UPSA impulsa programas de doble titulación en universidades de Europa y América Latina. En paralelo, el trabajo social que desarrolla en el Distrito VI de Santa Cruz refuerza su filosofía humanista: servir a la comunidad desde el conocimiento. “Las personas son el centro del quehacer de la UPSA, sobre ellas trabajamos buscando un pensamiento positivo, libre, productivo y amante de su tierra”, recalca Müller, reafirmando una convicción que combina educación, propósito y transformación personal.
Preparamos a nuestros estudiantes para la creación, gestión y liderazgo en actividades productivas e innovadoras.
LA VISIÓN DE FUTURO

Mirar hacia adelante es parte del ADN institucional de la UPSA. Con casi medio siglo de historia, la universidad proyecta su evolución a través del Plan Horizonte 2035, que busca consolidarla como una institución “internacional, tecnológica y profundamente humana”. “Nuestra Universidad nació para vivir siglos”, afirma Müller con la convicción de quien lidera desde la visión.
En un mundo en constante cambio, la UPSA continúa encendiendo la chispa que dio origen a su historia. Y lo hace reafirmando su lema: “Somos verde UPSA, somos Santa Cruz”—una unidad indivisible entre conocimiento, identidad y futuro.
