Alcohosol inaugura su primera fase y marca un hito en el desarrollo industrial de Bolivia

La planta Alcohosol, impulsada por un grupo de jóvenes inversionistas bolivianos, ha inaugurado la primera fase de su proyecto, consolidándose como un ejemplo de visión empresarial en un contexto económico desafiante. Con una capacidad de producción de 17.000 litros diarios, la planta se especializa en alcohol potable de alta calidad y alcohol industrial, abasteciendo sectores como el medicinal y el de bebidas alcohólicas.
Innovación y ampliación hacia biocombustibles
En su segunda fase, cercana a inaugurarse, Alcohosol incorporará la producción de alcohol anhidro, un biocombustible clave para reducir la dependencia de combustibles fósiles importados. Según Fernando Daza, gerente de proyectos, “producir alcohol anhidro será un aporte importante para el país, especialmente en momentos en los que enfrentamos escasez de combustibles. Esto ayudará a disminuir pérdidas económicas en sectores clave como la agroindustria”.
Sostenibilidad y apoyo al sector agrícola
La planta utiliza sorgo y maíz cultivados por productores locales, fortaleciendo la economía agrícola del Chaco boliviano. Además, la introducción de biotecnología en la producción agrícola permitirá incrementar la productividad de los cultivos, asegurando un suministro constante de insumos.
“La biotecnología generará granos más resistentes y aumentará la producción de alimentos y materia prima”, destacó Daza.






Tecnología y estándares internacionales
La planta opera con tecnología de Porta Hermanos, una empresa argentina con más de 30 años de experiencia en la industria del alcohol. José Escobar, gerente de planta, explicó que el proceso productivo incluye un sistema de fermentación y destilación de última generación, respaldado por cuatro tanques de almacenamiento con capacidad de 150 metros cúbicos cada uno. Además, los subproductos generados, como la burlanda, aportan un valor agregado al sector pecuario.
Proyección de exportaciones
Aunque actualmente la producción está destinada al mercado interno, Alcohosol ya proyecta exportaciones a países vecinos como Perú, Chile y Paraguay. La planta busca posicionarse como un referente en el mercado regional, tanto en el sector sanitario como en el de bebidas alcohólicas.
Resiliencia ante desafíos económicos
A pesar de obstáculos como la falta de acceso a divisas y la escasez de diésel, los inversionistas de Alcohosol han demostrado su compromiso con el desarrollo de Bolivia.
“A pesar de las adversidades, ellos apuestan por el país. Su compromiso debería servir como ejemplo para otros empresarios”, subrayó Daza.
Con este proyecto, Alcohosol no solo responde a las demandas actuales, sino que también sienta las bases para un futuro sostenible y competitivo, destacando el potencial de Bolivia en la industria regional e internacional.