CAMARA NACIONAL DE INDUSTRIAS- EVALUACIÓN ANUAL LA INDUSTRIA BOLIVIANA EN 2025 DECRECE -1%
La Cámara Nacional de Industrias (CNI) presenta su Informe Anual de Evaluación donde confirma una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) industrial del -1% para 2025, profundizando una tendencia negativa iniciada en 2024 (crecimiento de 0,18%) y configurando un escenario de recesión sectorial.
Evolución de la variación del PIB de Bolivia y el PIB Industrial
Gráfico con variaciones del PIB Industrial y PIB entre 2019 y 2025

El decrecimiento industrial no responde a un factor aislado, sino a la convergencia de múltiples variables estructurales y coyunturales que han erosionado la base productiva, entre ellas:
1. Restricciones de oferta y costos
La escasez de hidrocarburos (gas, diésel y gasolina) actuó como un severo estrangulamiento energético para la producción, mientras que el encarecimiento de la divisa (dólar) elevó exponencialmente el costo de materia prima, insumos importados y maquinaria, comprimiendo márgenes y capacidad de inversión.
2. Caída de la inversión
Se observa una caída en dos frentes. La inversión privada industrial se retrajo debido a la percepción de inseguridad jurídica y la falta de incentivos fiscales. Paralelamente, la baja ejecución de la inversión pública no generó la demanda necesaria para dinamizar la cadena productiva.
“La CNI confirma que la industria boliviana caerá -1% en 2025, profundizando la recesión iniciada en 2024.”
3. Distorsiones de mercado y marco institucional
El contrabando y la falsificación operan como competencia desleal, capturando segmentos de mercado y desincentivando la innovación.
Este fenómeno en 2025 se agravó en un entorno de inseguridad jurídica, donde la falta de reglas claras y su aplicación discrecional desalentó los compromisos de capital a largo plazo.
4. Contexto político-económico
La crisis económica nacional, con una proyección de caída del PIB global del -0,5% para 2025, y el ciclo de elecciones presidenciales, típicamente asociado a la postergación de decisiones estratégicas, completaron un panorama de incertidumbre que frenó la actividad industrial.
Indicadores cuantitativos que confirman la trayectoria crítica
La contracción industrial se materializa en datos concretos que delinean un sector en retroceso
