CAO: “Lo que el anterior gobierno intentó regular terminó creciendo”
El presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Klaus Frerking, afirmó que las políticas de control aplicadas por la anterior administración no solo fueron ineficaces, sino que en muchos casos provocaron el efecto contrario: el crecimiento de aquello que se buscaba regular. Sus declaraciones fueron realizadas durante una entrevista en el programa ON – Otra Noche con Sissi Áñez.
Ese costo lo trasladaron al productor. Y un productor no va a trabajar para perder.
Antes de lanzar esta crítica, Frerking recordó que Bolivia convive con “fronteras vivas”, una condición que vuelve casi imposible controlar la salida o el precio de ciertos productos. “Si se pretende fijar el precio del ganado, simplemente se va a ir por contrabando, porque afuera se paga más. No se puede regular el mercado. Todo lo que el anterior gobierno quiso regular terminó creciendo”, señaló.
El éxito del sector ganadero y avícola, impulsado por la no intervención
Durante el mismo programa, Walter Ruiz, presidente de Fegasacruz, destacó el desarrollo alcanzado por la ganadería boliviana, especialmente en calidad genética bovina, la cual hoy es un producto de exportación con demanda internacional.
Frerking profundizó esta idea asegurando que el reconocimiento mundial de la genética boliviana —segunda mejor del mundo en ganado cebuino y primera en la raza nelore mocho— es resultado directo de la ausencia de restricciones rígidas. “No pudieron regularla, y por eso seguimos avanzando: incorporamos tecnología, realizamos fertilización in vitro, transferencia de embriones. La innovación prosperó porque no hubo trabas”, explicó.
El dirigente también citó al sector avícola como otro ejemplo de éxito derivado de la libertad de mercado. “No pudieron regular la comercialización de aves, y por eso fuimos eficientes”, añadió.
El lado opuesto: un sector lechero asfixiado
En contraste con los avances del sector cárnico y avícola, Frerking alertó sobre la grave crisis que enfrenta la producción lechera. Según los datos expuestos:
- En Cochabamba, la producción cayó en un 50%.
- En Santa Cruz, disminuyó en un 30%.
- La producción nacional bajó de 1.800.000 litros diarios a 1.400.000 litros, es decir, 400.000 litros menos por día.
Para el titular de la CAO, esta caída está directamente relacionada con las políticas del anterior gobierno, que habrían obligado a las industrias a vender la leche a precios por debajo del valor real del mercado. “Ese costo lo trasladaron al productor. Y un productor no va a trabajar para perder. Por eso muchos dejaron de producir”, sostuvo.
Un llamado a replantear las políticas de control
El análisis compartido por Frerking establece un patrón claro: los sectores donde no hubo intervención estatal se modernizaron, atrajeron inversión y ganaron competitividad internacional; mientras que aquellos sujetos a controles estrictos se vieron debilitados, perdiendo capacidad productiva.
Todo lo que el anterior gobierno quiso regular terminó creciendo.
Su intervención deja sobre la mesa un mensaje central: regular de manera excesiva no siempre garantiza estabilidad y puede terminar asfixiando a quienes sostienen la economía productiva del país.
