San Gabriel convierte sus panetones en una experiencia de marca con mascotas coleccionables y premios

La marca de panetones San Gabriel ha decidido llevar su campaña navideña un paso más allá del producto, apostando por una estrategia de marketing emocional y experiencial que transforma la compra en un juego. A través de la incorporación de sus mascotas oficiales en los empaques y una promoción que incluye regalos y premios, la marca busca fortalecer el vínculo con los consumidores y diferenciarse en una categoría altamente competitiva durante la temporada de fin de año.

La promoción gira en torno a sus mascotas, personajes diseñados para conectar especialmente con públicos familiares y jóvenes, que hoy aparecen como protagonistas de los panetones. Estos personajes no solo cumplen una función estética, sino que actúan como embajadores de marca, humanizando el producto y generando cercanía emocional. En marketing, este recurso permite que una marca tradicional se perciba más cercana, lúdica y memorable, especialmente en un contexto como la Navidad, donde las decisiones de compra están fuertemente influenciadas por la emoción.

En Navidad, las marcas que conectan emocionalmente ganan la decisión de compra

El incentivo de “regalos incluidos” refuerza la propuesta de valor. Al ofrecer premios y sorpresas dentro de la promoción, San Gabriel introduce un componente de gamificación que estimula la compra por impulso y fomenta la repetición. El consumidor no solo adquiere un panetón, sino que participa en una dinámica que despierta curiosidad y expectativa, dos elementos clave para destacar en el punto de venta frente a marcas que compiten únicamente por precio o tradición.

Desde una perspectiva estratégica, la campaña también apunta a la recordación de marca. Asociar los panetones con personajes reconocibles y una experiencia positiva aumenta las probabilidades de que el consumidor recuerde a San Gabriel más allá de la temporada navideña. Este tipo de acciones refuerzan el top of mind y permiten que la marca se mantenga relevante en un mercado donde muchas propuestas tienden a ser visual y conceptualmente similares.

Diferenciarse ya no es solo cuestión de producto, sino de emoción

Con esta promoción, San Gabriel demuestra cómo una marca de consumo masivo puede reinventar su comunicación sin perder su esencia. Al combinar mascotas, regalos y un mensaje festivo, la empresa convierte un producto tradicional en una experiencia de marca, alineada con las tendencias actuales del marketing, donde lo emocional, lo interactivo y lo memorable pesan tanto como el producto en sí.